Queridos hermanos y hermanas en Jesús y María:
Como algunos sabrán, a principios de esta semana pasada tuve otro episodio cardíaco que requirió nuevamente hospitalización y cateterismo, pero esta vez me llevé mi iPad y un teclado inalámbrico, y gracias a Dios y a su Santísima Madre, logré continuar publicando mis reflexiones diarias a través de mi teléfono celular desde mi cama de hospital.
En esta ocasión no fue necesario instalarme otra malla metálica (stent) en una de las coronarias (angioplastía), como la semana anterior, sino que decidieron tratarme con medicamentos a largo plazo.
El Señor y la Orden de Predicadores me llaman a servirle, pero tengo que tomar decisiones importantes al respecto durante las próximas 24 a 48 horas.
Le ruego me mantengan en sus oraciones para que el Señor me de el discernimiento para escuchar su Voz y acatar su Santa Voluntad.
Gracias nuevamente por sus múltiples mensajes de apoyo y solidaridad, pero sobre todo por sus oraciones.
En Cristo y María,
Héctor L. Márquez, OP