Nuevo vídeo en De la mano de María TV: María, madre de la unidad

Del 18 al 25 de enero, al celebrar la semana de oración por la unidad de los cristianos, los católicos invocamos con fervor a María, Madre de la unidad. En este corto te explicamos por qué.

CURSOS A SER OFRECIDOS EN ISTEPA DURANTE EL SEMESTRE ENERO-MAYO DE 2023

Hermanos; les acompaño nuevamente el calendario académico y cursos a ser ofrecidos en el Instituto Superior de Teología y Pastoral Luis Cardenal Aponte Martínez de la Arquidiócesis de San Juan Bautista de Puerto Rico.

Este servidor estará impartiendo dos cursos, a saber:

Eclesiología – jueves de 7:00 a 9:00 pm en la Parroquia San Luis Rey (Reparto Metropolitano)

Presidentes de Asambleas Litúrgicas en ausencia de Presbítero y Diácono – martes de 7:00 a 9:00 pm en las facilidades de ISTEPA (Extensión Forest Hills, Bayamón).

Ambos cursos se ofrecerán de manera presencial. Espero saludarles entonces.

CAMBIOS EN NUESTRA PÁGINA A PARTIR DE ENERO DE 2023

Queridos hermanos en Jesús y María:

Luego de un largo período de discernimiento hemos decidido hacer un cambio en el formato de nuestra página web/blog a partir de enero de 2023.

Hace una década, en enero de 2013, movidos por el espíritu, comenzamos a compartir con ustedes nuestras reflexiones diarias sobre las lecturas que nos ofrece la Liturgia para dada día del año. Durante ese tiempo hemos comentado en más de una ocasión las lecturas para los tres ciclos litúrgicos, así como los años pares e impares de la liturgia diaria, con más de dieciocho millones de vistas.

Paralelamente, desde mayo de 2021 comenzamos a publicar nuestras “cápsulas marianas” y otros vídeos cortos de formación mariana en nuestro canal de YouTube De la mano de María TV.

Por ello, hemos tomado la decisión de descontinuar la publicación de nuestras “reflexiones diarias” en esta página para dar paso a otros proyectos de evangelización que próximamente compartiremos con ustedes, incluyendo el desarrollo de nuestro canal de YouTube mariano, añadiéndole el nuevo formato vertical de shorts de esa plataforma.

Además, reviviremos nuestro canal personal Héctor L. Márquez, O.P., que ha estado “invernando” durante más de siete años, con la publicación de reflexiones cortas en vídeo, aprovechando el nuevo formato de shorts que hemos mencionado.

No obstante, periódicamente estaremos compartiendo en esta página artículos de formación y espiritualidad, así como reflexiones para algunas solemnidades, fiestas, y memorias litúrgicas especiales. Igualmente, estaremos compartiendo los enlaces para nuestros vídeos en YouTube.

De paso, les invito a suscribirse a ambos canales, asegurándose de activar la campanita para recibir notificaciones cada vez que se publique un nuevo vídeo.

¡Bienvenidos a esta nueva etapa de evangelización en el continente digital!

Bendiciones.

REFLEXIÓN PERSONAL EN TORNO A LA DESPEDIDA DE AÑO

Revisando mis archivos me topé con esta reflexión que escribí hace una década, y he decido compartirla con ustedes hoy:

Nos encontramos una vez más a punto de pasar la página del almanaque de la historia de la humanidad. Un cambio de fecha, un cambio de año cronológico que marca el punto del tiempo lineal que nos ha tocado vivir en eso que llamamos eternidad. Y para poder encontrarle sentido a esa eternidad hemos decidido ordenar el tiempo en momentos medibles a los que podamos referirnos para construir eso que llamamos historia. Para ello, nos inventamos los segundos, los minutos, las horas, las semanas, los meses, los años, las décadas, los milenios…

Y en ese ejercicio tomamos como punto de referencia el acontecimiento más importante en toda la historia: El nacimiento del hijo de un artesano y una doncella de Nazaret. Así, el tiempo se mide en antes y después del nacimiento Jesús el Cristo. Algunos, influenciados por el secularismo que promulgan unos seudo-intelectuales, prefieren utilizar los términos “antes de la era común” y “era común”, como si con cambiarle el nombre pudieran borrar el punto de referencia: Jesús de Nazaret, el Verbo encarnado.

Cuando se acerca el cambio de año calendario, rememoramos las buenas y malas experiencias del año que termina, hacemos resoluciones para enmendar o mejorar aquellas cosas que entendemos debemos mejorar, proyectos que debemos comenzar o terminar, etc. Festejamos, celebramos, lloramos, pedimos, y pedimos… Y ese ejercicio de convierte en un ritual de fin de año que se repite año tras año, con el mismo festejo, las mismas resoluciones, las mismas peticiones. La única diferencia es el número del “año nuevo”.

Alguien ha dicho que “todo el año es Navidad”. Igual podríamos decir que “todo el año es Año Nuevo”. Porque Jesús viene a nosotros todos los días con la Buena Noticia del Reino. Así, todos los días se nos plantea la posibilidad de comenzar una nueva etapa de nuestra historia personal que nos encamine a la salvación, para poder un día gozar de ese estado en el que el tiempo será irrelevante. Cuando todo será un eterno presente en el que veremos Su rostro y llevaremos Su nombre en la frente. Noche ya no habrá; no tendremos necesidad de luz de lámpara ni de luz del sol, porque el Señor Dios nos alumbrará, y reinaremos por los siglos de los siglos (Cfr. Ap 22,3-5).

Aparte de la celebración folklórica de despedida de año, esta fecha nos brinda una magnífica oportunidad para reconocer la presencia de Dios en nuestras vidas y darle gracias por todos los dones que nos ha prodigado, fruto de su Amor infinito, comenzando con la vida misma. Y si abrimos nuestros corazones a ese Amor infinito, no existe experiencia negativa alguna que pueda privarnos de la alegría que este nos provoca. Por eso tenemos que compartirlo con todo el que nos rodea, y podemos decir con san Juan que “hemos conocido el amor que Dios nos tiene, y hemos creído en Él. Dios es Amor y quien permanece en el amor permanece en Dios y Dios en él” (1 Jn 4,16).

Y si permanecemos en el Amor, ¿qué mejor manera de corresponderle al Amado que comenzar el nuevo año acudiendo a su Casa a honrar a su Madre, participando de la solemnidad de Santa María, Madre de Dios?  Averigua los horarios de las misas del 1ro de enero en la parroquia más cercana y participa de la verdadera celebración. Entonces estarás comenzando un “feliz año nuevo”, no importa las circunstancias.

Aprovecho para desearles a todos un Año 2023 lleno de la PAZ que solo el saberse amado por Dios puede brindarnos. ¡Feliz Año Nuevo!

REFLEXIÓN PARA LA SOLEMNIDAD DE SANTA MARÍA, MADRE DE DIOS 01-01-23

Hoy es el primer día del año calendario y el último día de Octava de Navidad, que es la prolongación de la Solemnidad de la Natividad del Señor. Y la Iglesia lo celebra honrando a María bajo su mayor título, con la Solemnidad de Santa María, madre de Dios.

Y aunque esta advocación mariana es tal vez la más antigua que se conoce en la Iglesia occidental, su celebración parece remontarse al siglo sexto, con la dedicación, un 1º de enero, del templo “Santa María Antigua” en el Foro Romano, uno de los primeros templos marianos de Roma.

En 1931, luego de que el calendario litúrgico hubiese instituido la celebración de la circuncisión del Niño Jesús para esa misma fecha, el papa Pío XI introdujo en el calendario litúrgico universal la Fiesta de María madre de Dios para el 11 de octubre, en conmemoración del décimo quinto centenario del Concilio de Éfeso, que decretó solemnemente el dogma de la Maternidad divina de María.

Te invitamos a ver nuestro vídeo sobre este dogma en nuestro canal de YouTube, De la mano de María TV.

Luego, en el proemio del capítulo 8 de la Constitución Lumen Gentium (LG 52), el Concilio Vaticano II, al reflexionar sobre el misterio de la encarnación, nos invita a venerar la memoria “en primer lugar, de la gloriosa siempre Virgen María, Madre de nuestro Dios y Señor Jesucristo”.

En atención a ello, con la reforma del calendario litúrgico posterior al Concilio Vaticano II, la Iglesia restituyó la celebración para el 1ro de enero con categoría de Solemnidad y precepto, bajo el título de Santa María, Madre de Dios.

¿Y qué mejor manera de culminar la octava de la Natividad del Señor, y celebrar el comienzo del año calendario, que acogiéndonos al amparo y protección de la Santísima Virgen María?

Siempre que comenzamos un nuevo año calendario, hablamos de las famosas “resoluciones de año nuevo”. Te invito a hacer la mejor resolución de año nuevo: esforzarte para recorrer el camino a la santidad a la que todos somos llamados. Si te has caído, levántate; si te has apartado, date vuelta y regresa al camino.

Para ello, te invito a fijar tu mirada en la Madre de Nuestro Señor y madre nuestra. En ella, que además de madre es amor, servicio, fidelidad, alegría, santidad y pureza, encontramos el camino más seguro que nos conduce hacia su Hijo, y nos introduce en su vida, ayudándonos a conformarnos plenamente con Él escuchando su Palabra y poniéndola por obra, de modo que algún día podamos decir con el apóstol: “y no vivo yo, sino que es Cristo quien vive en mí” (Gál 2,20).

Santa María, madre de Dios, muéstranos el camino a la santidad.

¡Bendiciones, y feliz año nuevo!